miércoles, 16 de julio de 2014

Cómo renovar el dormitorio con telas

Hay algunas pequeñas modificaciones en la decoración que hacen un gran cambio y es suficiente con eso para hacer una renovación del dormitorio.

¿Cómo podemos hacer un cambio con poco dinero?

Considerando dos temas el color y las capas

Empecemos…

El color

¿Qué es el color?

Es una percepción visual que nos genera sensaciones y la ventaja es que podemos aprovecharnos del color para influir en nuestros estados de ánimo.
Muchas veces en la decoración, el problema no es el color sino su ausencia.

En tren de hacer todo clásico y que no pase de moda, se pintan las paredes de color blanco o natural, pasteles muy claros que hasta se confunden. ¿Es rosa o durazno? ¿Es verde o celeste? También, los sillones blancos o negros, las alfombras de un color oscuro, muebles...
La habitación se transforma en algo insípido e intrascendente.

El dormitorio es un lugar para el relax, así que nos conviene elegir colores que transmitan relajación. 


Estos son los principales:



El violeta o morado es el color más relajante y facilita la desconexión con lo que nos rodea. Generalmente eso intentamos en los dormitorios, desconectarnos de la rutina diaria para iniciar el descanso.
El color rosa es muy relajante a nivel muscular y nos invade con sensación de mimos y cuidados.
El color verde además de tranquilizar, conecta con la vida, la alegría, crea una sensación optimista, nos conecta con la naturaleza.
El azul también tranquiliza, pero al ser un color frío no es recomendable en estados de ánimo muy bajos, es preferible en este caso el verde. En cambio, el azul cielo ayuda a descargar tensiones físicas y mentales.

Seleccionemos tres colores que combinen, pueden ser dos relajantes y uno más activo para detalles como el rojo, naranja o amarillo, y bajo el siguiente esquema hacemos los cambios:

  • 60% color dominante
  • 25% a 30% color secundario
  • 10% a 15% color de acento

El color dominante es el de las paredes, que sea neutro y esto no significa blanco, gris o beige, sino un tono claro o suave en la gama del elegido, sea un azul, un verde o un violeta.

El color secundario lo ubicamos en la ropa de cama y las telas juegan el papel más importante.


Dependiendo si es un dormitorio matrimonial o de una persona podemos  elegir diseños y texturas: flores, rayas, pájaros, motivos geométricos. 
Esta es la parte más interesante para combinar tonos claros y oscuros, además de distintas texturas que aportan las telas: chenille, lino, algodón, piel, lana, seda, para crear sensaciones placenteras.

El color del acento lo dan los detalles como almohadones, cuadros y adornos enriqueciendo la atmósfera del cuarto.


Las capas

¿Qué son las capas?

Es la superposición de elementos y colores lo que da distintas sensaciones de confort y calidez a la habitación.
Es una parte clave de la decoración moderna y todo gira en torno a ellas.

En la ropa de cama las sábanas, las mantas, las colchas, los pies de cama, edredones, almohadas, almohadones de distintas texturas, colores, tamaños y formas hacen el conjunto principal en el armado del ambiente del dormitorio.
La superposición de estas piezas combinadas entre sí y en base a la regla de los tres colores renuevan la decoración.

¡No temas poner mantas o pie de cama sobre los edredones y varias almohadas! 

El resultado es agradable y cómodo.

Completamos sin olvidarnos de los anexos:
  • Las cortinas de tela suave para controlar la cantidad de luz natural que ingresa en la habitación.
  • La iluminación artificial para crear distintos efectos debe ser natural y originada desde varias fuentes: luz ambiental, una lámpara de pie, una lámpara en la cabecera para lectura.
  • La alfombra que combine para cortar la monotonía del piso.

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¿Qué esperas para renovar tu dormitorio con telas?



Consultas: 
http://www.howtodecorate.com
http://www.sew4home.com




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